Una noticia que apareción en prensa -no sé dónde ni cuándo-, incluso podría ser mentira. O no.

En el museo del hombre de parís se programó una conferencia sobre genética humana impartida por un prestigiosos catedrático en la materia. El catedrático, al llegar al museo pidió prestada la chaqueta al conserje y entró en la sala explicando que el catedrático no había podido asistir, pero que él conocía el tema y que estaba dispuesto a dar la conferencia.

La sala estaba llena y el catedrático transmitió sus conocimientos con la misma habilidad de siempre. Al preguntar a los asistentes en el exterior sobre el nivel de la conferencia, la mayoría despreció el nivel intelectual del "pobre conserje".